Se acabó y no puedo asimilarlo

Tras dos años y un mes de relación, anoche Pablo y yo le pusimos punto y final a la que ha sido la historia de mi vida, al amor de mi vida.

Hace un mes me dijo que quería dejarlo que me había empezado a ver desde hacía algún tiempo como una amiga, en éste último mes lo hemos intentando, lo he intentado todo, pero algo que se ha roto en mil pedazos ya no hay forma de pegarlo y que quede bien.

Siento que me ahogo, me ahogo todo el rato, no puedo respirar. No puedo dejar de pensar en mi, en él, en que ha pasado, en las dos familias, en las cosas que hemos hecho, en las que se han quedado pendientes... mi cabeza es una olla a presión a punto de estallar. No se callan las voces, yo no quiero oír nada más pero no se callan.

Tengo frases de la conversación de anoche clavadas en el alma:
-Has sido la novia perfecta.
-No puedes hacer nada más, lo has intentado todo.
-No es culpa tuya, tu no tienes nada que ver.

No tenéis ni la menor idea como duele que te dejen así, como araña cada letra el corazón.

Una colección de cartas a medias, una tele que compre sólo para ver pelis o jugar con él, las series y programas que veíamos juntos, las llaves de mi casa, una cuenta del banco compartida... una vida destrozada.

En estos momentos no tengo dignidad, no tengo esperanzas, no tengo nada. Entiendo a un suicida, entiendo el dolor que puede sentir una persona y que le haga hacer una locura. Entiendo la locura.

Nos hemos dado un par de semanas para nosotros antes de decirlo en casa o amigos y tal. Lo que más desearía en el mundo es que tras ese tiempo me dijese que me necesita, que se ha dado cuenta que le hago falta, no soy ingenua, se que eso no va a pasar por más que yo lo desee.