martes

Miedo

Llevo unos días sin escribir en el blog y los últimos post evitando hablar de mí, de lo que siento, que es lo que últimamente tenía por costumbre. La explicación, o mejor dicho, el motivo, es que estaba tan cansada de repetir una y otra vez lo mismo que ya ni ganas de escribir tenía. El escribir en un blog todo lo que pasa por mi cabeza y mi corazón era más que nada para sacar todo lo que tengo dentro, que no es poco.

El fin de semana a sido bastante movidito emocionalmente hablando. Ayer me puse mala con.. bueno ya sabeis, todos los meses viene ha hacer la puñeta, puede que sea por eso por lo que haya estado tan sensible. Sí, yo soy de las tías que cuando está con la regla no hay quien las soporte. Tiene sus cosas, unas veces me pongo agresiva y salto a la mínima, otras simplemente me da por tomarme muy a pecho todo lo que ocurra (éste mes a sido así).

Llorar es poco. No recuerdo haber llorado tanto en mi vida. Soy muy muy mazoca, entonces como estaba tan sensible, triste, melancolica y todo sinónimo que se os ocurra, qué mejor cosa que ponerse a ver "siete almas" el sábado y "el curioso caso de benjamin button" el domingo. Yo estaba llorando ya antes de poner las pelis, así que imaginaos cuando me puse a verlas. Las cataratas del niagara al lado mía no eran nada. Creo que he batido un record en pañuelos de papel.

No recuerdo en que serie o peli que vi que digeron una frase que me hizo "click" en la cabeza y encendió todas las alarmas. El resultado fue el convencimiento de que tenía que decirle ya sin falta todo lo que siento, que había llegado la hora y no tenía que esperar mas.

Al intentar autoconvencerme de que eso era lo correcto, que tarde o temprano lo tendría que hacer y que el momento no se podía posponer mas, las lagrimas se apoderaron de mí.

No lo puedo ni explicar. Supongo que estoy dando una imagen de sensible, niña tonta que no afronta los problemas... pero es que con él mi mundo se para, juega a parte.

Como estaba diciendo, no lo puedo ni explicar, fue una sensación de miedo, de dudas, de angustia, incertidumbre que se podía resolver si yo ponía de mi parte. Pero el miedo era mayor a las ganas de saber.

Empecé a meditar realmente cómo iba a decirselo, cómo podía plantearle ésto. No encontraba el momento ni el lugar. Mi cerebro bloqueaba toda mi imaginación. Lo mejor sería quedar un día expresamente para decirselo, o tal vez hacerlo como algo casual cuando nos vieramos éste finde que ya habré terminado los exámenes... entonces me paralicé.

SAN VALENTIN. El sábado es 14 de febrero. Mas lágrimas aún. No me lo podía creer, ese día no podía hacerlo, ese día no quería hacerlo. Es un cliche, es un día que no me gusta nada. Definitivamente este fin de semana no iba a ser.

Entonces me paré a pensar de nuevo y sabía que tenía razón. Sino lo hacía en un momento de decisión como el que había tenido, no lo iba hacer, porque el miedo al rechazo es inmenso. Estoy siendo tan cobarde que no me reconozco. Pero es que si obtengo el "no te quiero".. ¿ que hago?. Es muy sencillo decir, pues intenta olvidarlo. Ya llegará tu chico ideal.. todo eso en teoría está muy bien, pero en la práctica son días, meses y no quiero decir años, pero también se ha dado el caso, de estar realmente mal (vamos como estoy ahora) pero además con el añadido de que él puede cambiar su forma de ser conmigo. Ésto es algo que no puedo saber, no se como va a reaccionar y eso es lo que me da miedo. Porque tengo clarisimo que no siente nada por mí, entonces el decirle todo sólo sería para liberarme yo de este peso que tengo encima, pero si eso va a suponer un cambio en su actitud hacia mí, no me compensa.
En resumidas cuentas, que sigo sin tener el valor suficiente...

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