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La semana pasada se celebró en Huelva, el Rocío. Esa romería con fondos religiosos que en lugar de eso se a convertido en una juerga sin fin durante una semana en la que muchos sólo van a beber. Cosa que a mí,la verda, no me importaría sino acarreara las consecuencias siguientes... porque ¿quiénes salen perjudicadps?, pues como siempre los animales, me refiero a los caballos, mulos, burros y demás, no a los dueños que en mi opinión son los verdaderos animales. Éste año han sido 23 las muertes, cinco más que el año pasado y eso solo en la Aldea, no se sabe cuantos mueren al poco de llegar a las cuadras o quedan cojos. Según el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil el 95% de éstas se deben a agotamiento, inanición y otras formas de maltrato. Los animales que van suelen llevarse año enteron encerrado en una cuadra y no están preparados ni entrenados. Además no los alimentan correctamente ni los hidratan y pueden pasarse horas y horas subidos encima de ellos y los tienen atados al sol, es un abuso. Muchos, además, suelen ser alquilados: “ Y al dueño le sale más rentable que se les muera”. El seguro de retirada de cadáveres sólo cuesta tres euros.
Y ésto no es todo lo "malo" del Rocío, también está que pasa por Doñana y que cada año se destrozan plantas y un hábitat protegido, pero dejemos esto para otra ocasión.
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